Ulises

Ha fallecido Iñaki Ochoa de Olza, uno de esos tipos que tenía historias interesantes que contar. Seguro que fue jodido, pero sospecho que morir a 7.400 metros de altura, haciendo lo que más te gusta en la vida es una buena forma de morir.

Él decía: "escalar es una opción, un camino en la vida, y como toda elección, supone dejar otras cosas atrás. Pero nunca me he arrepentido, y siempre he vuelto a casa contento, a recobrar nuevas energías, y partir una vez más, como decía Doug Scott, atado al mástil como Ulises, buscando esas islas que brillan en el cielo con luz propia".

Por expreso deseo suyo, su cuerpo no será repatriado y descansará en la montaña para siempre. Los marineros al mar y los montañeros a la montaña. Así es la vida. Y así es la muerte.